Alice y Martin

En Alice y Martin Téchine utiliza un truco de montaje, para explicar con narrativa cinematográfica un cambio psicológico de un personaje, que siempre me ha fascinado: Martin cae de nuevo en una crisis mental, el mar se detiene y de forma brusca la imagen del oleaje recomienza como si fuera un fallo de una cinta de vídeo; la verdad ... a mi me funciona, narrativa y emocionalmente .



" No creo que exista avance, que quepa la idea de progreso en la afectividad, en el amor y el odio, en la alegría y el padecimiento. Hay progreso técnico, cultural, social, pero no moral y afectivo. (...) Pero no creo que debamos quejarnos de esto, sino luchar contra ello ; y la lucha es siempre un esfuerzo optimista. Vivir es estar en conflicto.De ahí que crea que sólo desde el pesimismo es posible percibir el disfrute de vivir".
André Téchine