" (.. ) hay  que  sacar  algo  que  uno  lleva  en  la  piel,  que  hay  que  purgarse para  escapar  de  algo  que  está  impregnado  en  el  aire,  en  el  tiempo. Todo este rodeo para decir esto –que creo que es una idea que está en Deleuze–: uno guerrea contra sí mismo. Cuando uno piensa está en guerra contra sí mismo... Los poderes nos atraviesan, la mediósfera 
nos atraviesa, las parálisis, las tristezas fabricadas socialmente..., son todos elementos que nos hacen luchar contra nosotros mismos.Pero creo que hay maneras distintas de luchar. Una es extrínseca-mente: determinás un enemigo y él siempre está afuera, y vos estás del lado bueno. Allá está el mal, y acá el bien. Vos sos del partido de la alegría, contra el partido de la tristeza. El partido de la colectividad, contra el del individualismo. Es muy fácil esta forma, pero es inocua, porque estas atmósferas en realidad atraviesan todo, no hay un afuera, una extraterritorialidad a partir de la cual se pueda ‘juzgar’ el mundo o  rechazarlo.  Más  bien  hay  cosas  que  se  deben  atravesar.  Hay  una manera que es luchar contra, pero desde el comienzo en ese “contra” existe una dialéctica un poco viciada. Y la otra es, creo, meterse para salir por otro lado. Me gusta la imagen de Mil Mesetas sobre la gente que necesitó hacer un agujero en la montaña para salir del otro lado. " 
 Peter Pál Pelbart
 Imagen: Max Ernst 
martes, 12 de octubre de 2021
es un pliegue del mundo, es una manera de plegarlo
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