lunes, 27 de octubre de 2008

Fuego al fuego.

A la espera de echarse las manos a la cabeza cuando descienda la venta de coches, una vez culminada la crisis energética, los mismos que utilizan las revindicaciones ecológicas como escusa electoralista, están alarmados ante la inminente hecatombe de la burbuja inmobiliaria. Es esa masa informe, sin objetivos radicales, que lleva como ridícula mascara eso de la izquierda pero que poco se diferencia de la otra facción porque realmente estan en el mismo bando: defendiendo la espiral del consumo y de la producción; cuando el crecimiento se frena tiemblan al unisono que sus patrones...
Poco importa que tengamos viviendas para todos,(porque son de todos, eso lo tiene claro la conciencia del pueblo siempre díscola con la propiedad privada). Ahora toca aliarse a la la sinrazón y temer la caída de la construcción porque eso conlleva perdidas en nuestros salarios y nuestras hipotecas ... Se ven peligrar miles de empleos en la construcción... ¿pero alguien ha trabajado en ese reino de la esclavitud moderna, la carestía existencial y el carajillo mañanero que es la obra?; hombres alienados bien molestados por burdos capataces y cancerígenos materiales acompañados de desconfiados iguales insoportablemente excluidos incluso de nuestro tonto ocio bien adoctrinados para seguir multiplicando los feos cubículos que hace tiempo que ya se construyen para no ser habitados pero bien temerosos de perder el sustento y su coche y su corderito y su fútbol ...
_
Esta es la miseria que apoyan las izquierdas y, ahora, para perpetuar la situación, no viene mal avivar el miedo: ¡Qué no llegamos a pagar la hipoteca!
Existe otro reducto en los corazones: el recuerdo de la comunidad de iguales, la consciencia de la posibilidad de un mundo que merezca ser vivido y un trabajo que merezca ser laborado, el rechazo a la raíz del egoísmo institucionalizado y el impulso de enfrentar de una vez por todas el ataque medioambiental de la sociedad del dinero a la diosa madre tierra. Es vital!

No es la primera vez que se plantea una huelga de alquileres : El movimiento de la huelga de alquileres, un proceso de 1918 hasta 1936 , es un muy interesante texto de la revista Etcétera, leelo aqui entero:((=))
Dibujo de el roto.

No hay comentarios: